Cuando hablamos de los aspectos psicológicos de la enfermedad crónica nos referimos a los factores que intervienen en los modos de reaccionar de la persona frente a la enfermedad, y que tienen un papel en la expresión de los síntomas y en las implicaciones que producen en su vida. Además, estos factores junto con los biológicos y sociales no son simplemente aditivos, sino que interactúan.

¿Y qué aspectos psicológicos hemos de tener en cuenta?

Por un lado, los relativos a las características psicológicas individuales que ejercerán una gran influencia, estaríamos hablando de:

• Tipo de personalidad, estilo de afrontamiento
• Inteligencia emocional
• Habilidades y competencias
• Procesos cognitivos y motivacionales: creencias, expectativas y atribuciones.

Y, por otro lado, hablaríamos de los aspectos psicosociales asociados a la aparición y evolución de la enfermedad crónica, como por ejemplo:

• La adaptación psicológica, emocional y social
• El impacto emocional: miedo, estrés… posibles repercusiones en la autoestima-autoconcepto
• Trastornos psicológicos asociados como la ansiedad, depresión…
• Afectación de la enfermedad en el sistema familiar, entorno y calidad de vida
• Adhesión al tratamiento y mejora de hábitos de vida

Tomar consciencia de la importancia de los aspectos psicológicos ante la enfermedad crónica, detectar los factores de riesgo y comprender e intervenir en todas las variables bio-psico-sociales implicadas es lo que nos permitirá:

1. Pasar realmente, como profesionales de la salud o del ámbito social, de un modelo reactivo centrado en la enfermedad, a un modelo idiográfico y proactivo centrado en la persona, sus características y contexto, y así dar una atención y seguimiento de calidad.

Tener la mirada de: “no hay enfermedades sino personas con una enfermedad” pasa por conocer las dimensiones psicológicas, emocionales y socio-familiares que hay detrás de cada persona que padece una enfermedad crónica: “lo esencial invisible”.

2. Potenciar los factores facilitadores de la adaptación, afrontamiento, autocuidado, adhesión al tratamiento y calidad de vida de las personas en procesos de enfermedad crónica.

La psicología también aporta estrategias facilitadoras en cada fase del proceso de la enfermedad crónica, así como herramientas comunicativas y de prevención del burn-out de los/las profesionales.

Si quieres prepararte para los desafíos en las dimensiones psicológicas, emocionales y familiares que te encontrarás en el acompañamiento de las personas que padecen una enfermedad crónica consulta nuestro nuevo curso express aquí.

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Cristina Soler. Psicóloga. Miembro del equipo docente de Nutritional Coaching.